Desayuno de trabajo

El trabajo me lleva a lugares (físicos y mentales), a los que nunca había imaginado llegar. Pienso en esto frente a un café con leche y un mini-croissant cubierto de chocolate, mientras escucho hablar sobre el mal de ojo y otras tradiciones selváticas africanas. Llegan a mis oidos palabras como trono, cocina de leña, ceniza, traspaso de poderes y varias revelaciones más. Esucho, escucho atentamente mientras mojo en el café, interfiero lo menos posible, intento comprender sin cuestionar. Lo que me están contando es importante para mi interlocutor y por tanto también para mi. Yo descreido de todo, con una fé desmedida en la ciencia que no llego a comprender, hago preguntas aclaratorias mientras muevo la cucharilla en círculos concentrícos y lanzo hipotesis que lleven la conversación hacía un terreno en el que pueda encontrarme más cómodo. Así se despereza la mañana, aquí estamos, así de vivos.

Oferta empleo INAEM

Todos los años por estas fechas me llega un correo electrónico con una oferta del servicio aragonés de empleo. Siempre puntual, aunque este año un poco antes y con una pequeña novedad. El puesto que ofertan es el de Promotor/Monitor Papa Noel. Uno de los requisitos que se piden, como bien imaginais, es que hace falta apariencia física similar a Papa Noel. Esa es la parte que más me gusta de toda la oferta. Si os estais preguntado por la novedad, os diré que este año «se realizaran funciones de interacción a través de  videollamada (previamente solicitada) con niños». Vamos que para ir acorde con el año del teletrabajo y los vermús virtuales… este año el 24 de diciembre, Zoom, Zoom, Zoom.

Juventud

De entretiempo

No me gustan las palomas pero estaban muy saladas para la foto.

Hoy tengo ganas de contaros una cosa. El equipo de auxiliares con las que he estado trabajando todos estos días.

Me han alegrado la vida, me han hecho el trabajo fácil y me han ayudado muchísimo. Siempre disponibles y encantadas. No os podéis imaginar el lujo que es esto.

Yo, que sé que hablo con mucha determinación, vamos, que soy mandona, he intentado cuidarles mucho y ser muy amable. Ya sabéis que a veces me pierde la boca y hablo demasiado. Pero no con ellas y ellos. A ellas sólo puedo decirles por favor y gracias.

Las veo allí toda la mañana. Son las que más tiempo pasan, vistiendo, aseando, haciendo camas, dando de comer, limpiando culos. Pero también les dan conversación, les escuchan, les bailan y les hacen bailar, juegan al guiñote con ellos, les hacen reír…

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Primero de mayo

Hoy es el día Internacional del trabajador. Y tengo fiesta. En principio me tocaba currar pero me cambiaron el turno. También es primer viernes de mayo y en Jaca no han podido salir a la calle a celebrar la fiesta. Recuerdo cuando vivía en Echegaray que pesadico era el reloj con el himno “Jaca libre sabe vivir…”. Me han mandado fotos de casas decoradas con las banderas y un desfile de playmobil. Hoy también me he acordado de cuando fuimos a visitar la tumba de Marx en un cementerio de Londres de cuyo nombre no me acuerdo. He limpiado el suelo de casa con lejía perfumada porque desde el principio del encierro no lo hacía. También he puesto a lavar la ropa de invierno qué aún no había lavado. He buscado un chándal para romper mañana el confinamiento pero resulta que no tengo. He comido un postre del Dia que no conocía, es portugués, se llama Serradura y estaba delicious. Disfrutad mañana del paseo. Besos.

Compañeros (no-te-fa-lla-ré)

Sin poder hacer una defensa de la profesión tan ardiente y apasionada como la que hizo Rachell hace semanas (que parecen siglos), en su blog y que la volvió a catapultar a la fama mediática 😉 yo sólo diré que estoy encantado con mis compañeros de trabajo. Ana Influencer E. chica yo creo que siempre caigo de pie, porque de verdad que a lo largo de la vida me ha tocado trabajar con gente maja, remaja. De la mayoría de ellos/as he aprendido muchísimas cosas y hemos pasado algún que otro trance que nos ha unido forever. E incluso con al gente que no me acabo de llevar del todo bien, solemos llegar a un punto de tolerancia que hace que al menos la cuestión laboral pueda salvarse.

El otro día cuando a horas intempestivas nos llamarón a una reunión urgente, con cambio de funciones de por medio, nervios por lo desconocido y una pandemia tras los cristales… no vi una mala cara, un comentario en voz baja quejandose, un bufido, n-a-d-a. Puede que haya influido que le hemos perdido algo el miedo al virus, que estabamos cansados del tele-trabajo, que el riesgo de contagio no es alto, sea lo que sea la actitud del grupo fue estupenda. Somos 7 de los cuales 3 se presentaron voluntarios (a los otros cuatro no nos dieron opción, je, je, je), tenemos unas jefas entregadas y mucha voluntad por hacer bien las cosas. Esto y no otras cosas me llenan de orgullo y satisfacción. Me gusta estar rodeado de gente así. De hecho no entiendo las cosas de otra manera. Sé que tengo suerte y por eso intento cuidarles igual que hacen ellos conmigo. No sé si estaremos mucho en este trabajo, ni siquiera si nos mantendran los contratos en el anterior, pero siempre confío y confiaré en la bona gent. Besos, que ya falta menos.

Pd. Raquel deja de discutir de política y vuelve a la bebida y a la canción ligera.

esquina

Esa mano tan amarilla no puede ser que tenga…

Telegrama

He ido a trabajar. Con alegría a pesar de ser lunes. Sin nada reseñable. Laisa ha tenido al bebé. Me he cortado yo mismo el pelo. No he tenido tiempo de más. Estoy bien. Cuidaros.

Mindunguis

Hola R, hola A,

gracias por vuestras líneas generosas y tempraneras, yo ya veis que voy un poco a deshora, pero es que ni en este estado de retiro me da el día para más. Menos hoy que ya me he incorporado al trabajo. La verdad es que hemos estado bastante a gusto, hablando, organizándonos, haciendo llamadas y enterándonos que somos un servicio esencial, que nos van a organizar en equipos para cubrir servicios mínimos y que estamos a disposición del Ministerio de Sanidad para que nos ordenen cambio de funciones cuando deseen. Cuando nos lo decían las jefas, que han venido cuatro (creo que no tenemos más), nos sentíamos como un batallón de fuerzas especiales altamente preparado para catástrofes apocalípticas… y resulta que somos unos mindunguis. Pero bueno, unos mindunguis con una importante misión.

Cuando iba a trabajar he pensando en el del quiosco de la once, en las floristerías con todo el genero marchitando tras el escaparate, en todos los negocios chinos que hoy lucen un cartel de cerrado por vacaciones y en los trajes de novia y madrina que me miraban con rabia sabiendo que la próxima temporada no estarán de moda. Por eso me parece interesante la propuesta de reflexión, incluso la de desobediencia. Yo creo que igual tenemos que dejar un poco el WhatsApp y este estado de alerta hiperinformada en el que andamos y tomarnos nuestro tiempo para restiuarnos. Bueno es sólo una opinión y ya sabeis que que esto es como los culos, cada uno tiene el suyo. Después David Liquen me ha mandado unos audios y ya se me ha ido el santo al cielo. Por cierto donde más aire hacía era al cruzar el Ebro y en el Paseo Independencia, que marcaba 7 grados el termómetro. El otro día era primavera y hoy frío y todo el día lloviendo, a ver si va a tener razón Sergio y el verdadero enemigo es el cambio climático y no el “corre virús” que le ha dicho una usuaria a mi compañera. Ahí lo dejo. Os cuidáis y le sonreís a la pandemia. Bss.

PD. Me está saliendo un grano en la nariz, justo en el puente y no puedo parar de preguntarme ¿será esto un síntoma de haber pillado el bicho?

Máquina del café

Cada vez menos pero aún saco algún café de la máquina que está junto al trasto de los fichajes. Hoy me he vuelto a encontrar dinero en el cajetín. Tengo compañeros despistados. Desprendidos. Eso o soy el afortunado con un sorteo aleatorio de monedas por ser el cliente del día. Sea por lo que sea, el primer café de la mañana me ha salido por 10 céntimos. Subo las escaleras sonriente, con el bolsillo lleno de chatarra, imaginando que trabajo en el Congreso de los Diputados.